20 y 21 de Enero: Movilizaciones en Reus, Girona, Lleida, Terrassa y Barri del Clot (Barcelona).
Ahora toca meter mano en el dinero dedicado a las pensiones. Para asegurar, según el gobierno, la viabilidad de las pensiones a largo plazo, proponen emprender entre otras las siguientes modificaciones:
a) Prolongar la edad de jubilación de 65 a 67 años. Se aseguran el ahorro del pago de dos años.
b) Variar el tiempo de cálculo del cómputo para el cobro de la prestación de 15 a 20 años. Se estima una media de un 5'45% de ahorro por cada pensión (50 euros al mes).
c) Aumentar el tiempo para poder cobrar la prestación máxima de 35 a 40 años. Con el mercado laboral actual, en la práctica sería imposible llegar a cobrar la prestación máxima.
d) Aumento del periodo para el cobro de una prestación mínima. Actualmente está en 15 años, se pretende elevarlo a 20 años.
Todo este paquete de medidas va encaminado a reducir de manera considerable el gasto en el pago de las pensiones, en general, ínfimas y ridículas, y a hacer prácticamente imposible garantizar el acceso a una gran parte de la población al cobro de unas pensiones dignas.
La dificultad de los jóvenes y las mujeres de incorporarse al mercado laboral y la inestabilidad y precarització de los puestos de trabajo, hace que estos colectivos sean especialmente vulnerables a estos tipos de medidas y se conviertan en las víctimas de un sistema capitalista neoliberal e insolidario, basado en una economía especulativa que solamente genera beneficios a las clases más ricas, y aumenta las diferencias sociales entre toda la población.
El sistema de pago de las pensiones tiene que estar basado en un principio solidario, donde las personas en activo participen y garanticen el pago de las pensiones de las personas grandes, y a su vez aseguren su viabilidad. El sistema propuesto pone en cuestión este principio solidario y pretende fomentar el crecimiento de los planes de pensiones privados como única alternativa, en beneficio de los intereses de la banca y dejando desamparadas a las personas más débiles que no se lo puedan permitir.
Ante esta nueva agresión, la única alternativa es la movilización, es imprescindible que nos organizamos todas y todos y avanzamos hacia una nueva Huelga General, participando de manera activa y contundente, están en juego nuestro futuro, nuestras condiciones laborales, nuestra vida cotidiana y nuestros derechos sociales. tenemos que defendernos, unirnos y salir a la calle.
Movilicémonos para parar la reforma de las pensiones, la reforma laboral y los recortes sociales.
Hace falta una nueva Huelga General.
Puedes ver el periódico JA N’HI HA PROU!, editado a raiz de estas manifestaciones, en: http://www.cgt.org.es/IMG/pdf/Ja_n_hi_ha_prou.pdf
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