Significativo es el hecho de que al juicio acudieron a declarar dos delegados del Comité de Empresa de UGT, testimonios que el juez declara en contradicción con los hechos probados pues sí hubo intención ofensiva. UGT es el único sindicato presente en la mesa negociadora del Plan de Igualdad de Ford Almussafes, situación ésta denunciada por CGT.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Carlet (Valencia) acaba de reconocer en el insulto que un afiliado de UGT lanzó contra Paqui Cuesta (antigua delegada por CGT en Ford despedida el verano pasado), un delito de injurias penado con multa.
Los hechos tuvieron lugar en septiembre de 2009 cuando el militante de la UGT llamó "perra" públicamente y ante 200 trabajadores hombres a la entonces trabajadora de Ford. Así, durante el juicio, celebrado el pasado mes de febrero, han quedado acreditados estos hechos condenables jurídica y éticamente, pero también ha quedado patente el apoyo del sindicato UGT en Ford a estas actitudes machistas e irrespetuosas.
Y es que, dos delegados del sindicato mayoritario testificaron que el denunciado había pedido inmediatamente después perdón a Cuesta y que la expresión "no tenía carácter ofensivo". El juez afirma en su fundamentación que esto resulta contradictorio pues "si se pidió perdón, es claro que se era consciente de que se había ofendido". Y concluye, además, que la expresión "tiene un claro carácter despectivo, que se intensifica al ser proferida ante una pluralidad de compañeros de trabajo".
Es importante destacar que, tal y como aparece en la sentencia, Paqui Cuesta había sido sancionada previamente por la empresa y que "En cierta forma, el denunciado había influido en su contra" al firmar una carta respaldando la sanción. Evidentemente, UGT ha jugado un papel activo en la campaña de desprestigio, sanciones y persecución a la que fue sometida Cuesta, hasta ser finalmente despedida.
CGT se felicita de esta sentencia y espera que suponga una limitación al clima de falta de respeto, discriminación, imposición de la fuerza y connivencia entre la dirección de Ford-Almussafes y el sindicato UGT para socavar derechos sociales y laborales adquiridos.
Por último, la Confederació manifiesta que la lucha por la igualdad pasa inevitablemente por acabar con casos como el sufrido por Paqui Cuesta, mujer trabajadora y luchadora que fue perseguida hasta ser sancionada con la pena máxima, el despido, mediante prácticas que forman parte del nefasto ideario patriarcal.
Gabinete de Prensa CGT-PV
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