Esta es la nota entregada al Comité de Empresa:
Y lo que no tiene desperdicio es la que dirigió a todos los trabajadores, con unos textos que perdurarán para siempre en nuestra memoria: "... director de personal, que es el interlocutor natural de los Comités de Empresa en España y en los países civilizados...", "...las tentativas desestabilizadoras de una minoría...", "... realizar acciones nimbadas con el atractivo sentimiento del romanticismo anarquista...", "... aquellos que creen que trabajar es cumplir un horario fijo y controlado, confundiendo esta profesión con una cadena de producción, han equivocado su camino..." ... ¡qué tiempos aquellos!
Me encanta el estilo del señor Israel. Le imagino ajustándose el monóculo, sentándose frente a su escritorio estilo Luis XV, mojando en el tintero una pluma de ganso y redactando estas cartas con su florida prosa XD
ResponderEliminarMe voy a nimbar un rato, como buen anarquista romántico...
Dicen que quien guarda, halla. Sois unos fenómenos.
ResponderEliminarLas cartas hablan por sí solas. Es fácil de observar que con el paso del tiempo, hay cosas que no cambian… y otras que van a peor, aunque por aquellos tiempos fuese impensable.
- “…necesitaba ‘el voto favorable, personal, libre, directo y secreto, incluido el voto por correo, de la mitad más uno de los trabajadores de la empresa o centro de trabajo’”.
Esto no ha cambiado (la ley sigue igual). La forma de aplicarla tampoco. La empresa la sigue aplicando como le viene en gana y algunas secciones sindicales (CCOO y UGT) también. Cuando conviene si, cuando no, no. No obstante, no hace tanto tiempo que hemos echado de menos su aplicación, en el sentido que explica la carta.
- “Numerosas reuniones de las que existen actas que pongo a disposición de quien quiera leerlas”.
¡¡Que tiempos!!. Impensable a día de hoy.
- “(Este año hemos subido un 4,8% en media, 1,3% más que la inflación prevista), en vacaciones, en libertad de horarios, en seguros de vida y accidentes” .
Visto hoy, parece ficción.
Jajajaja!
ResponderEliminarQué recuerdos! Lo que nos llegamos a reír con aquella carta
Al menos sabían escribir. Vamos que hasta disminuyó el nivel cultural. Eso sí, antes decían claramente lo que pensaban aunque fuera políticamente incorrecto. Ahora tratan de aplicar lo mismo pero sin reconocerlo. Al fin... la misma política empresarial pero al menos antes te lo decían con un lenguaje de más nivel..ejej..Si... tiempos aquellos.
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