Reclamamos que la empresa cumpla la resolución de la Inspección de Trabajo del 24 de julio de 2012 en la que se le requería que "los conceptos incluidos en las Nóminas se identifiquen con la debida claridad" y que sigue sin cumplir tras cinco años. También insistimos en que el recibo de Nómina al que la plantilla tiene acceso debe ser siempre un documento correcto, y no ir variando en el tiempo sin dejar rastro de lo anterior.
La empresa se escuda en que son errores puntuales y que se van resolviendo, pero los mismos errores aparecen reiteradamente desde hace años sin que se les dé una solución definitiva. Por otro lado, se lamentan de que con la aplicación de ADP (*) hay cosas que no pueden hacer, aunque eso suena más a excusa que a otra cosa.
La inspectora pareció entender perfectamente que un recibo de Nómina debe reflejar claramente qué se está abonando y qué se está descontando para que el trabajador pueda interpretarla sin dificultad, y saber en cada momento qué está cobrando y qué tiene pendiente de cobrar.
Esperamos que la empresa empiece a hacer bien las cosas y no tener que volver más a la Inspección por este asunto.
(*) La empresa a la que externalizaron el servicio de Nóminas que tantos problemas ha generado (y todavía sigue en ello) y por los que la empresa nunca se ha disculpado.
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